Como les contaba el sábado pasado mi necesidad más personal de reconectarme en este 2017 con lo que me gusta, hoy van a conocer el primer rincón de mi casa (de todos los que voy a ir compartiendo este año) para desafiarme a mi misma con el Proyecto #casaconmiradacreativa.
Amo trabajar desde mi casa, pasar horas en este mix que me parece perfecto de vida personal y profesional disfrutando la versatilidad de mi dulce y cálido hogar.
Tengo algunos cambios en mente y para eso me están ayudando las chicas de Estudio RUCA, pero puedo asegurarles que así como está ahora mi casa es 100% disfrutable, vivible y recibidora de amigos.
Hoy estreno con este rincón
Es un costado del sillón más cómo del mundo que compramos con mi marido; yo lo quería en gris pero había que esperar 40 días para recibirlo. Tenían este color en stock, y entre la necesidad de resolver de mi marido y mis ganas de compartir momentos de sillón juntos hicieron que éste sea el elegido.
Los almohadones son obra y arte de mi talentosa madre. Todo lo hace, todo lo puede; es m á g i c a!
Es autodidacta en casi todo, así que me regaló dos almohadones íntegramente bordados por ella hace unos dos años.
Éste rincón termina de ser perfecto gracias a la decoración del sector verde que amamos tener fuera y dentro de casa. Quiero vivir en una selva, de a poco vamos conquistando rincones con mucha vida. Si bien no le dedico el tiempo y cuidados que requieren, amo mis plantas. Aceptamos que las flores no sobreviven: por el viento, por tanto sol directo que tenemos, y vaya a saber por qué más; por eso nos entregamos a las plantas más verdes para que vistan nuestro hogar.
Desde este rincón miro series de Netflix, cuando estoy sin fuerzas trabajo con la compu desde ahí. Leo, contemplo atardeceres por la ventana. Es sin dudas uno de mis rincones de inspiración creativa.
Se animan Uds. a mostrar un rincón de su casa? Súmense a jugar conmigo este año compartiendo sus fotos con el hashtag #casaconmiradacrativa
Buena semana,
Maru
Maru, seguis la tradición , las felicito!!!
Gracias Lelia 🙂